No os dejéis engañar por el título de esta historia: la verdad es que estoy muy contento con mi Nintendo DS y juegos como Brain Training o Big Brain Academy como para pensar en comprarme uno de los nuevos y en general carísimos armatostes que reproducen videojuegos adictivos de los que mejor no saber nada. Y además, si le pregunto a Herr Spock la respuesta va a ser fuerte y clara: la Wii. Por otra parte, tras descubrir que el doctor Strangelove tiene un blog, como que ya no puedo concentrarme en las consolas.

Pero aunque no tengo intención de comprarme ninguna consola de videojuegos, de vez en cuando especulo con esa posibilidad. He sido muy feliz en el pasado gracias a las consolas, y por qué no, también podría serlo en el futuro. Y claro, el problema es que hay mucha oferta en el mercado: la PS3, la XBox 360 y la Wii.

La primera que consideraremos, la PS3, es la más cara, la más potente, la más grande y la última en salir. Es la delicia de los tecnófilos hard-core, que no parán de decirte lo del HDMI, el Blu-Ray, el montón de GFlops que tiene, y otras maravillas por el estilo. También es de un tamaño enorme: perfecta para la gente que también compra libros de esos grandotes para llenar la estantería (yo, sin embargo, continuamente rezo por encontrar una versión de bolsillo del libro que busco). Personalmente, el hecho de que sea tecnológicamente más avanzada que las otras no me resulta muy tentador. Creo que la percepción que uno tiene del un videojuego mejora logaritmicamente con la tecnología, y, además, no tengo una pantalla de esas extraplana y con superaltadefinición para notar las microscópicas mejoras en los gráficos. Sinceramente, desde los tiempos de la Dreamcast, la PS2, la XBox y la Gamecube, el aspecto técnico de los juegos ya ha alcanzado un nivel muy aceptable como para que sea en lo primero que uno piensa. Lo que uno busca ahora son ideas originales.

Sin embargo en otro aspecto si que me convence la PS3: ¡puedes instalar un linux! Y 600 lerus no parece tan caro para un ordenador. De todas maneras yo esperaría a que saliera una versión en pequeñito de esta consola antes de comprarla (que saldrá). Aunque la verdad es que pensando en el destino de mi PS2, reproductor de DVD (sí, muy poco friki por mi parte), no sé que partido le sacaré a la PS3 si me la compro...

La siguiente de la que hablaremos será la Wii, la hermana pobre de las nuevas consolas y la más baratita de las tres. Lo de la hermana pobre lo digo porque es la más humilde técnicamente. Es básicamente una Gamecube con esteroides. Pero el reso de la historia la conocemos todos: una nueva forma de jugar, distinta, más fresca y más original. Adios a la antigua forma de jugar: ahora uno utiliza el cuerpo entero, no sólo la mano. Hay que admitir que no es tan, tan original como nos hacen creer: de hecho, esta forma de jugar ya fue anticipada por juegos como EyeToy hace ya bastante tiempo. Nintendo tan sólo lo ha llevado a su perfección. Y lo mejor es que es barata, aparte de divertida, lo que la hace muy tentadora.

Además, hay otra cosa importante: la Wii podría ser el canto del cisne de Nintendo, su última consola, y por tanto la mejor. Bueno, en realidad no lo creo, pero lo digo porque Nintendo es una compañía relativamente pequeña que lucha en un mercado muy competitivo contra dos gigantes, y eso hace que dependa exclusivamente de su imaginación y creatividad, ya que no pueden competir en otros frentes. En tales condiciones de presión y de cercana extinción sólo cabe esperar lo mejor de Nintendo. Un poco como pasó con la Dreamcast de Sega, una consola que en sus tres años de vida vió unos juegos de una calidad excepcional, al menos en mi opinión, y creo que motivado por la situación tan crítica por la que pasaba Sega. Así que, ¿cuántas consolas más durará Nintendo? No lo sé, pero mientras, las que saque serán muy, muy interesantes.

Lo único que puedo añadir al respecto es que ya he jugado con ella en casa de Herr Spock, y en alguna otra parte, y es muy divertida, aparte de bastante recomendable debido a que haces ejercicio físico de verdad.

Por último, nos queda la XBox 360. Muy avanzada técnicamente, y con un precio intermedio entre el de la PS3 y la Wii, aunque un poco caro en mi opinión. Lo mejor que tiene respecto a su predecesora, la XBox a secas, es que su aspecto y tamaño ya no son horribles. Ahora la puedes tener en el salón sin necesidad de cubrirla con un paño. Por lo demás, no sabemos demasiado de ella en papelera, salvo que se está vendiendo bien, y que tiene muchos juegos. Tal vez una magnifica opción cuando baje de precio, como ocurrirá en uno o dos años.

Así que esto ha sido todo. No hemos dicho gran cosa, y no estamos seguros de nada, pero podéis aconsejarnos un poco más en los comentarios, o simplemente poner vuestra opinión. ¶